El otro día, navegando por Internet me encontré un artículo muy interesante acerca de cómo la tecnología va a reinventar el deporte.

Ya sea para encontrar la mejor alineación para afrontar un partido, mejorar el rendimiento de los jugadores o encontrar y fichar futuras estrellas todavía sin descubrir, la tecnología puede ayudarnos a cubrir todas estas necesidades.

En Londres, una empresa llamada ASI Data Science, dedicada a la ingeniería de datos y a la inteligencia artificial ha ayudado a un club local de rugby a descubrir nuevos talentos desconocidos empleando técnicas de ‘machine learning’ (aprendizaje automático) y análisis de datos.

“La inteligencia artificial va a continuar con el progreso que ya ha comenzado la tecnología, mejorando el conocimiento que tenemos del juego, ayudando a que sea más interesante para los fans y ayudando a que se encuentren los mejores talentos”, explica Marc Warner, CEO de la compañía.

A medida que iba leyendo el artículo, no podía parar de pensar cómo van a ser los procesos de selección de personal del futuro ya que cada vez más, los empleados estaremos igual de monitorizados que lo que puedan estar los deportistas de élite.

Frente a la búsqueda tradicional de nuevos candidatos, que requiere examinar cientos de currículums y pasar horas comprobando redes sociales para evaluar las habilidades de un candidato, este tipo de softwares permitirán introducir el nombre de un “empleado estrella” y descubrir fácilmente otros similares a él.

La cantidad de información diaria que procesa cualquiera que se dedica a realizar los procesos de selección de una empresa es ingente.

Por tanto, ya no solo aplicar inteligencia artificial como hemos visto antes, sino que la aplicación de técnicas de Big Data al servicio de la captación de talento irá tomando relevancia de manera y existirán sistemas tan perfectamente afinados que pueden reducir sustancialmente el número currículos hasta un candidato que será la mejor propuesta.

Además, ya no hay fronteras. La tecnología no sólo ha facilitado el que las personas puedan aplicar a puestos de trabajo lejos de ellos, sino que también, ha hecho más fácil para las empresas encuentren candidatos calificados en cualquier lugar del mundo. Un simple ejemplo es LinkedIn, en la que las empresas pueden encontrar candidatos cualificados con las habilidades adecuadas, sin los límites de la geografía.

Fuente: El Confidencial